... Aún no he abandonado la fase “quiero disecarlo todo”. Así que mi obsesión por reciclar productos cotidianos me ha llevado al maravilloso mundo de los frutos secos.
Eso unido por mi otra patología crónica (el reciclaje) ha dado como resultado unos simpáticos broches de pajitas negras con palomitas de maíz y kikos grandes.
Y hasta un pasador de pelo realizado con palomitas de maíz recicladas.
Definitivamente, alguien tiene que frenar esta locura … o terminar de encauzarla.
Over
No hay comentarios:
Publicar un comentario